¿Cuando se debe consultar al psicologo?

Parecería que nunca está demás.
Existen un sinnúmero de situaciones frente a las cuales no sabemos como comportarnos, y esto nos impide resolverlas, o bien, aunque sabemos lo que debiéramos hacer, nos sentimos “trabados”, y esto nos genera un sufrimiento innecesario. Otras veces hacemos lo que creemos correcto, y podemos llevar adelante una vida “normal”, pero por momentos nos invade la angustia, y no podemos entender por qué.
También cuando cualquier cambio en nuestra vida (duelos, mudanzas, casamientos, etc.) nos requiere un grado de adaptación que puede resultar difícil de llevar.
Otra opción es cuando una persona se propone dar un salto cualitativo en su vida (inicio de una carrera, un nuevo proyecto laboral, mudarse solo o con su pareja, etc.), y prefiere revisar sus motivaciones y sus recursos para así dar ese paso con la mayor firmeza posible.
La psicoterapia es fundamental en los casos en que una persona sufre cualquier tipo de episodio traumático (robo violento, pérdida inesperada del trabajo, accidente, violación, acoso moral o sexual en el trabajo, acoso en la escuela, fallecimiento de un familiar, especialmente hijos o parejas, etc.)
Daremos ahora algunos ejemplos concretos.
En los niños conviene consultar cuando:
· aparecen síntomas de dificultades de aprendizaje.
· excesiva inquietud.
· problemas de conducta.
· hay crisis de llanto.
· manifiestan ansiedad y la angustia.
· Enuresis (“mojan” la cama)
· Encopresis (incontinencia fecal)
En cualquiera de estas circunstancias es importante acudir a la consulta psicológica porque todo lo que se detecta precozmente tiene mayores posibilidades de ser revertido en menos tiempo.
En los adolescentes los cambios en el humor y el comportamiento son parte de esta etapa de su vida. Estos cambios dejan de ser “normales” cuando:
· afectan la convivencia en la familia.
· afectan el rendimiento en los estudios.
· el adolescente manifiesta “como puede” que no se siente satisfecho consigo mismo ni con el entorno.
· aparecen síntomas de ansiedad y/o angustia.
· estrés.
· ataques de pánico.
· trastornos de la afectividad.
· tienen dificultad para vincularse con los demás.
· presentan trastornos de la alimentación (bulimia, anorexia, etc.)
· tienen problemas con las drogas.
Todos estos síntomas merecen ser consultados. La otra consulta que pasa a primer plano en esta etapa es la orientación vocacional.
En adultos para resolver
· problemas de pareja y/o sexualidad.
· ataques de pánico.
· ansiedad y/ o angustia y/o depresión.
· dificultades en las relaciones con la familia o en el ámbito laboral
· Dificultades en la crianza de los hijos

En los adultos mayores ante:
· crisis relacionadas con la jubilación.
· sentimientos intensos de soledad.
· desintegración familiar.
· por dificultades de inserción social.
Hicimos una enumeración de algunas de las posibles causas de consulta. Si crees que vos o alguna persona cercana a vos atraviesan por estas o cualquier situación que le genere sufrimiento, contactanos.

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